Patricia Krentcil afirma que todos los que la critican son gordos, feos o están celosos de su aspecto. El pasado mes de mayo nos sorprendía en los medios de comunicación la noticia de que se la juzga por exponer a su hija de 5 años a rayos uva.
Cada año aumenta el porcentaje de personas que padecen estos síntomas, especialmente en verano. El perfil de esta enfermedad lo presentan mayoritariamente mujeres, con edades comprendidas entre los 20 a los 50 años, aunque lo cierto es que el porcentaje de hombres ha aumentado en los últimos años de forma significativa. Durante los meses de invierno las personas que padecen esta obsesión utilizan de forma compulsiva e incontrolada largas sesiones de solárium y rayos UVA, una práctica muy peligrosa que puede degenerar en serios problemas de piel y un T.O.C. (Trastorno Obsesivo Compulsivo).
Los síntomas más característicos son:
• Bronceado intenso de la piel.
• Baja autoestima, depresión encubierta y trastorno obsesivo compulsivo.
• Situaciones de ansiedad relacionadas en muchos casos con manías alimentarias.
• Edades entre 20 a 50 años en ambos sexos.
• Conducta de visitar solárium y rayos UVA.
• Quemaduras en la piel que tratan de ocultar con maquillajes.
En la anorexia en la que los pacientes se ven gordos ante el espejo, en la tanorexia se ven blancos, esta conducta debe ser tratada por un especialista. Así, es un psicólogo quien puede ayudar a estas personas que desarrollan este trastorno compulsivo, pero, además, puede generar problemas en la piel, derivadas de las exposiciones excesivas por el sol, que han de ser tratadas por un dermatólogo.
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