Un año más por
estas fechas aparecen las ya conocidas por todos “dietas milagro”, dietas de
adelgazamiento que prometen rápidas y mágicas pérdidas de peso sin apenas
esfuerzo, que se difunden a través de distintos medios de comunicación, prensa,
revistas, televisión, etc, llegando de este modo a todo el conjunto de la población. Este
año le ha tocado el turno a la “dieta de la sonda nasogástrica” avalada
“encima” por una conocida clínica catalana, y hace pocos días leíamos en la
prensa que la variante americana “Ketogenic enteral” está haciendo furor entre
las “novias” americanas para perder peso antes de la boda “10 kilos en 10
días”… tremendo.
Por este motivo,
desde la Asociación de Bulimia y Anorexia de Pontevedra (ABAP), queremos hacer
una reflexión sobre este tema, y solicitar a los lectores que sean críticos con
toda esta información que recibimos cada primavera y, cada vez más, en
cualquier mes del año, y recordarles que todas estas dietas carecen de rigor
científico y además tienen consecuencias para la salud a distintos niveles:
alteraciones gastrointestinales, alteración de los niveles de colesterol, ácido
úrico, etc., riesgo de osteoporosis, patologías renales, irritabilidad,
depresión…. Y por supuesto, por nuestra
experiencia en la Asociación, podemos afirmar que estas dietas son, en muchas
ocasiones, el preámbulo del desarrollo de trastornos alimentarios, trastornos
con graves consecuencias físicas y psicológicas, que alteran enormemente la
vida del paciente y su entorno, y que requieren de tratamiento durante largos
meses e incluso años.
Por todo esto, no
debemos cegarnos con toda la información que nos llega, y tenemos que hacernos
conscientes de que el único camino saludable para perder peso es la
modificación progresiva y constante de nuestros hábitos alimentarios y de vida,
para así lograr, cuando sea necesario, esa pérdida de peso y el mantenimiento
posterior, sin poner en juego la salud y la vida.