miércoles, 10 de septiembre de 2014

EL ESPEJO DE LA VIDA

¿Cómo superar la anorexia, la bulimia, un trastorno por atracón...?

Cuando una persona enferma de anorexia o bulimia está triste, desganada, irritable, susceptible…Se convierte en alguien totalmente distinto al que era antes. Hace daño a las personas a las que más quiere y, sobretodo, se hace daño a sí misma.

Veámoslo de manera metafórica: en ocasiones, el cuerpo enferma y se debilita, necesita de un tratamiento y reposo para que, pasado un tiempo, ¡vuelva a estar como nuevo!. Esto sucedería cuando tenemos fiebre, por ejemplo. Veamos entonces la anorexia como una fiebre que podemos curar. Ahora la gran pregunta: ¿cómo?.

Sin lugar a dudas y, aunque sea el paso más difícil de dar, es imprescindible un cambio en la alimentación. Esto no tiene por qué darte miedo, piensa que dejar de comer o darte atracones te está haciendo ser infeliz y llorar muchos días, no puede ser bueno, ¿verdad?. Es algo lógico, pues sigamos pensando lógicamente: antes comías bien y estabas en el peso que te caracteriza (todos tenemos uno), y nuestro cuerpo está hecho a aceptar un número determinado de calorías y desechar otras muchas.

No temas, porque es precisamente la comida quien te ha llevado a esta situación, así que este paso de afrontamiento es importantísimo. ¿Sabes lo que viene después? Empezarás a disfrutar más que nunca de todo cuanto hagas. Qué apetecible, ¿no?.

Cuando tú estés bien, todo lo de tu alrededor estará bien también. Por ello, es fundamental afrontarlo y, SÍ, empezar a comer sin apetito y/o venciendo esos pensamientos derrotistas que vienen después. En cuanto lo superes una vez, aunque sea una sola vez, lo podrás superar siempre.

Hay que normalizar las situaciones lo máximo posible y que la anorexia, la bulimia, el trastorno por atracón y etcétera, no sean el tema central de tu vida, porque estás intentando recuperarte. Así que la alimentación debe empezar a ser un tema secundario del que te estás curando, ¡como la gripe! Ni te imaginas, lo fuerte que puedes salir de una enfermedad que parece algo tan monstruoso.

Podemos cambiar aquello que nos hace daño si cambiamos la actitud. Como decía Mahatma Gandhi: “ la vida es como un espejo, te devolverá la sonrisa sólo si tú la miras sonriendo”.